La verdad que estos días estoy como fan adolescente, aunque ya de esa época ha pasado casi 30 años. La película Bohemian Rhapsody, realmente me transporto a esas épocas. No soy crítico de cine, pero esta es una película biográfica, de las pocas que me han hecho vivirla. Mercury, May, Deacon y Taylor nuevamente han vuelto.
Al principio, cuando la película ya se había estrenado y aun no la veía, pensé: ¿Para qué verla si la historia me la sé? He visto varios conciertos en vídeo, varios documentales y, a Freddie Mercury lo lloré el día que falleció. ¿Para qué más? Seguro los artistas ni se parecen y hasta son covers con un sonido diferente.
De chiquillo tuve como 4 discos de QUEEN, The Game (que realmente era de mi tío), Live Killers, The Works y The Myracle, este último ya lo compré en casete original. También varios 45 rpm y varias veces grabé el Grandes Éxitos. Y ni que decir de revistas con su historia y posters. Mis amigos —en mi barrio de la Perla, en el Callao— pintaron a Freddie Mercury y el logo de Queen en la pared trasera de una casa que daba a un parque y lo bautizaron como el Parque Mercury.
Foto de Mario Linares. Noviembre de 1992, La Perla – Callao.
Queen era una de mis bandas favoritas y lo es hasta ahora, y aunque no me lo crean, Bohemian Rhapsody era la canción que menos me atraía, casi siempre la saltaba cuando escuchaba sus canciones, prefería levantar el volumen y repetir mil veces las otras más conocidas como Somebody to Love, Killer Queen, Rock it, The Game, etc…
Y claro, el sueño de verlos en vivo en Perú, en aquellas épocas era realmente “el sueño”, quizás ahora ya hubieran venido hasta dos veces, por esa época ver el concierto de Wembley en vídeo era lo máximo. Y según la historia, su primera gira latina lo más cerca que pudimos estar de ellos, empezó mal cuando en México fueron a tocar a inicios de los ochentas y de casi más de 15 conciertos programados en ese país, solo tocaron tres, se dice que México no estaba preparado para recibir a un grupo de rock extranjero que moviera tremendas cantidades de masas, hubo desmanes, a los músicos les tiraron de todo en el escenario y las autoridades prohibieron muchas cosas. Era la gira del The Game Tour, luego continuaron con Venezuela, Brasil y Argentina, donde sí fueron conciertos históricos. En 1985 volverían a Brasil a tocar en el Festival Rock in Rio. A Perú no venía nadie.
Foto de David Bustamante.
Ahora nuestro país ha recibido muy bien esta película y ha puesto en el vocabulario de nuestros jóvenes las palabras Bohemian Rhapsody y, en sus oídos, grandes canciones, lejos del perreo y tanta basura musical que los está consumiendo mental y culturalmente. Así que dejé mi orgullo de rockero adulto y decidí verla.
Es una película donde en hora y media no se puede mostrar toda la trayectoria de una banda como Queen, pero lo esencial está. Aparte que se concentra en la vida de Mercury, no deja de lado la genialidad que tenían los demás músicos. Y lo más importante, su banda sonora está compuesta por grandes temas de la banda que suenan en estudio y en vivo, recorre la discografía desde sus inicios. Hay que hacer una observación eso sí, que muchas partes de la historia y los personajes parecen fuera de lo que en realidad sucedió, algo habitual cuando se filman películas biográficas para darle más realce a la historia. Sin embargo, los artistas se parecen a los originales y la historia avanza con etapas muy marcadas musicalmente, es por eso que a los que vivimos esa época nos parece conocida y nos emociona.
No duden que la volveré a ver nuevamente, y claro, ya estoy escuchando sus canciones, todo el día, como antes, emocionándome con sus melodías cambiantes, sus letras de amor, amistad, dolor y felicidad. Actualmente, Queen está conformado por los dos fundadores, el guitarrista Brian May, el baterista Roger Taylor y en la voz, Adam Lambert, un joven cantante que ganó un concurso de canto en televisión y, la película Bohemian Rhapsody ya ha ganado US$285 millones a nivel mundial.
